Piqué, en un encuentro con medios informativos, dijo que este plazo, similar a los 18 meses que se ha dado el Gobierno del Reino Unido para afrontar esta cuestión, es "razonable".

No obstane, el ministro destacó que el Gabinete español no se ha puesto "fechas topes", aunque coincide con el británico en que el actual "statu quo" del Peñón no se puede mantener.

El titular de Exteriores se refirió a que la situación de Gibraltar es un "anacronismo histórico", y que es un asunto que no puede seguir dificultando las relaciones con los británicos.

Destacó que el Gobierno español quiere mantener con Gran Bretaña una "relación plena" y "sin contenciosos", para lo que es necesario que se sovente lo de Gibraltar.

Sobre el estatus que podría tener en el futuro la colonia británica, Piqué recalcó que España no va a renunciar a la soberanía plena ni permitirá la autodeterminación del Peñón, pero destacó que pueden buscarse otras fórmulas.