Durante su declaración como testigo ate la juez titular del Juzgado Central de Instrucción número 3 de la Audiencia Nacional, Teresa Palacios, la administradora única de AGP reconoció que Gescartera pagaba todos los meses un porcentaje a su empresa en función del número de inversores y las cantidades de dinero que conseguía.

El pago se venía efectuando desde 1999, meses antes de que Gescartera obtuviera el permiso de la CNMV para convertirse en agencia de valores. Uno de los meses, que no supo especificar la testigo, la comisión por la cptación de nuevos clientes para Gescartera alcanzó los 6,8 millones de pesetas.

Junto a Anibal Sardón, Baltar era administradora de AGP, que prestaba servicios a Gescartera similares a los de su departamento comercial. Tanto Sardón como Baltar tenían los mismos poderes en la empresa y mantenían una estrecha relación con los responsables comerciales de la agencia de valores, hasta el punto de que tenían capacidad para "darles órdenes" sobre la entrada o salida de personas en su cartera de clientes.

La declaración de la administradora de AGP en la Audiencia Nacional, que se extendió hoy por espacio de casi tres horas, sirvió para "aclarar" algunos aspectos en la investigación. Sin embargo, habrá que "esperar" hasta que se conozcan los detalles de los informes económicos que están preparando la CNMV, el Banco de España y la Agencia Tributaria, según las mismas fuentes.