El gasto en innovación, en porcentaje de cifra de negocios, fue del 1,6%, media décima más que la tasa de 1996. El 43% de estos desembolos corresponden a actividades de investigación y desarollo (I+D), mientras que el resto corresponde a otras actividades innovadoras.

Las empresas de servicios de telecomunicaciones, por su parte, gastaron 129.860 millones de pesetas en estas actividades, lo que representa un 5% de su cifra de negocios.

En este último caso, el I+D supone el 33% de los gastos, mientras que la adquisición de tecnología inmaterial y de "software" supone el 17% de estas inversiones.