EL GASTO PUBLICO DEL 93 SERA INFERIOR EN 800.000 MILLONES A LO PREVISTO EN EL PLAN DE CONVERGENCIA

MADRID
SERVIMEDIA

El gasto público será el año que viene entre 700.000 y 800.000 millones de pesetas inferior a lo previsto en el Plan de Convergencia, según dijo hoy el ministro de Economía, Carlos Solchaga, tras aprobar el Consejo de Ministrs el Presupuesto del Estado de 1993.

Ese año, el gasto público ascenderá a 14.827.772 millones de pesetas, un 8,2 por ciento más que lo presupuestado inicialmente para el 92 y un 3,7 por encima de lo que será realmente gastado este año, tras las medidas de ajuste.

El capítulo más afectado por la austeridad de los presupuestos será el de funcionarios, al que el Gobierno aplicará una subida del 0 por ciento, si bien este incremento está todavía pendiente de la negociación que mantenga la Administraión con los sindicatos, según Solchaga.

Los menos perjudicados por el ajuste serán los pensionistas, que recibirán una subida media del 6,4 por ciento, igual a la inflación que prevé el Gobierno para todo el 92. Otro capítulo que será preservado de las restricciones es el de inversión civil, que crecerá un 6,2 por cien.

Solchaga no quiso precisar cuál es el crecimiento del PIB esperado para el 93, y se limitó a aclarar que será algo superior al 0,7 por cien, la última cifra barajada en los documetos de trabajo conocidos del Ministerio de Economía.

Reconoció que eso supondrá un aumento del paro, que no cuantificó, al tiempo que rechazó la alternativa de aplicar una política de reactivación, con el argumento de que provocaría más inflación y déficit público.

Tampoco aclaró el objetivo de inflación ni la subida salarial que sería coherente con el cuadro macroeconómico del Gobierno, a fin de no entorpecer en las negociaciones entabladas entre la patronal y los sindicatos.

En el capítulode los ingresos del Estado para 1993, Solchaga señaló que mantendrá las tarifas del IRPF de este año y que no deflactará las tablas de retenciones, con lo cual éstas serán mayores para los trabajadores que aumenten sus salarios.

Confirmó asimismo la subida de las cuotas a la Seguridad Social, en un 0,1 por ciento para los trabajadores y un 0,4 por cien para los trabajadores, lo que encarecerá en 80.000 millones de pesetas los costes salariales del 93, según las estimaciones de la patronal CEOE.

E IVA tendrá como principal novedad la introducción de un nuevo tipo reducido, mientras que la supresión del IVA del 28 por ciento será compensada, en el caso de los automóviles, con la aplicación de un nuevo impuesto de matriculación.

Solchaga dijo que esta medida se justifica por el gasto que los coches originan al erario público, a causa de la contaminación, el tráfico y el desgaste que producen en las infraestructuras de carreteras.

Otra vía por la que el Gobierno espera obtener mayores ingress es la venta de activos de empresas públicas. A este respecto, Solchaga dijo que mantiene la idea de ingresar por ese concepto 150.000 millones de pesetas en el 93 y 450.000 millones en un trienio.

MANTENER LOS OBJETIVOS

El ministro recalcó que el Gobierno mantiene los objetivos del Plan de Convergencia, para lo cual maniobrará fundamentalmente con una contención del gasto público en prácticamente todos los capítulos, salvo pensiones y los pagos de la deuda, que aumentarán en 400.000 millones.

Tampoco afectará significativamente, salvo en los sueldos de los profesores, al Ministerio de Educación, que podrá cumplir con normalidad el calendario establecido en la Ley Orgánica del Sistema Educativo.

A su juicio, las incertidumbres sobre el futuro obedece no sólo a las turbulencias financieras sino también a lo que calificó de "fracaso" del espíritu comunitario para resolver de manera global y cooperativa los problemas.

Advirtió que "estamos llegando a una situación difícil" en la que es neesario no esperar más tiempo para alcanzar un acuerdo global sobre tipos de interés y tipos de cambios de las monedas europeas, porque las reservas de divisas de algunos países atraviesan ya serias dificultades.

Explicó que ese acuerdo podría implicar o no un realineamiento de las monedas del Sistema Monetario Europeo, pero que debería servir para expresar la voluntad colectiva de los gobiernos comunitarios de mantener la estabilidad económica.

El ministro subrayó que España sigue abogando por un Europa de una velocidad para todos, salvo para los que se autoexcluyan del Tratado de Maastricht, como los daneses, pero que, en el caso de que haya dos, intentará estar en la primera.

Por otra parte, Solchaga expresó su confianza en que el Estado podrá renovar en los próximos meses los cuatro billones de deuda pública que necesita para financiar su déficit, sin recurrir a elevaciones significativas de los tipos de interés.

Reiteró que las medidas restrictivas adoptadas por el Banco de España paa limitar las operaciones en divisas tienen un carácter transitorio y que, en cuanto pasen las "turbulencias" financieras, serán eliminadas.

(SERVIMEDIA)
25 Ene 1992
M