Según el INE, el incremento obedece, sobre todo, al mayor esfuerzo inversor de las administraciones públicas, que subieron su participación un 10 por ciento. Las empresas y las universidades también elevaron sus partidas, con un incremento del 6 y el 5%, respectivamente.

De los 831.000 millones de pesetas destinados a I+D en 1999, las empresas aportaron 432.000 millones(el 52%); la enseñanza superior, 250.000 millones (30%); el sector público, 140.000 millones (17%), y las instituciones privadas sin fines de lucro, 8.000 millones (1%). En total, el gasto en investigación y desarrollo supuso un 0,89% del PIB, ligeramente inferior al 0,9% del ejercicio precedente.

En cuanto al empleo en el sector, el total de trabajadores creció respecto al año anterior un 5%, fruto también del crecimiento del empleo en el I+D del sector público.

El número de personas con dedicacón plena superó las 102.000, de las cuales 41.000 estaban empleadas en el sector universitario, 38.000 en las empresas, 22.000 en organismos públicos y 1.000 en fundaciones y en otras instituciones sin ánimo de lucro. El empleo en la enseñanza superior disminuyó un 1 por ciento.

Las compañías que más invirtieron en I+D fueron las pertenecientes a las ramas de material de transporte, que asumieron el 21 por ciento del gasto empresarial, seguidas de las industrias de fabricación de equipo eléctrico, eletrónico y óptico, cuya aportación fue del 18%. A continuación figuraron la industria química y los servicios de transporte y telecomunicación.

Las comunidades autónomas que más participaron en el gasto nacional en I+D, por orden de magnitud, fueron Madrid, con más de 264.000 millones de pesetas, y Cataluña, con 188.000. Después se situaron Andalucía y País Vasco.