Los gasolineros y los sindicatos reiteraron que dicha medida llevará al cierre de unas 4.000 estaciones de servicio y la pérdida de unos 12.000 empleos en toda España, y reprocharon al Ejecutivo que no haya mostrado "voluntad de resolver el conflicto" con la publicación de un borrador de Ley de Hidrocarburos.

Dicha ley es, según los empresarios de estaciones, la única posibilidad de proceder a una liberalización total del sector, y no una refoma parcial en la que se abre un "mercado paralelo para los camioneros protegido de la competencia real".

Para preparar el cierre, empresarios de gasolineras y sindicatos han creado ya una Comisión de Trabajo que se encargará de coordinar las movilizaciones en todas las provincias españolas, tarea que ya ha empezado.

El paro será anunciado el próximo 21 de noviembre y los convocantes aseguran que la única forma de evitarlo será la retirada de la autorización a los camioneros diseñada por el Gobiero a través de la Ley de Acompañamiento a los Presupuestos del Estado del año próximo.

Los empresarios de gasolineras y los sindicatos del sector reiteran que es legítima la aspiración de los camioneros de buscar el abaratamiento del precio del gasóleo para hacer más competitivo el sector del transporte de mercancías por carretera. Pero añaden que ese propósito también puede lograrse con una plena libertad de mercado que ofrezca a los camioneros la posibilidad de encontrar el combustible más barato en as mismas estaciones de servicio, y no en una red privada como la que pretenden crear las grandes cooperativas.