Durante las recientes movilizaciones de transportistas, agricltores y pescadores las compañías no modificaron los precios de los carburantes para facilitar la consecución de los acuerdos que finalmente alcanzaron el Ejecutivo y las principales patronales de esos sectores a cambio de compensaciones fiscales.

Pero "una vez finalizadas las protestas, y en apenas una semana de diferencia, las compañías petroleras se cobran el favor realizado al Gobierno a costa del bolsillo de los consumidores", aseguraron ambas organizaciones en un comunicado.

"No se pueden amitir los argumentos expuestos por parte de las compañías petroleras, basados en la situación de los mercados internacionales, ya que la situación es la misma ahora que hace un mes. Si durante un mes no ha habido motivo para el incremento, no se explica la subida de los carburantes en torno a un 8 por ciento en sólo una semana", afirman OCU y UCE.

Por ello, estiman que la última elevación de precios de gasolinas y gasóleo es "desmesurada, injustificada e inadmisible" y exigen "soluciones urgentes y efcaces" consultando a "todos los afectados, incluidos los consumidores finales, a la hora de proponer medidas para solucionar la situación actual".