En declaraciones a Servimedia, Pozuelo afirmó que las compañías tenían que haber reducido los precios "de manera inmediata. Han estado aguantando unos días desde que bajó el barril de petróleo, que están sacando beneficios directamente para ellos. El Gobierno tenía que haber presionado uficientemente a las compañías para que esta bajada fuera inmediata y además fuera suficiente".

Añadió que esta última reducción "no va a afectar a aspectos tan importantes como el gasóleo de calefacción, que ha subido más de un 70 por ciento del año pasado a éste, o el gas natural, que ha subido cerca de un 21%, seis veces la inflación acumulada, o la bombona de butano, con una subida del 17,4%, o de los gases licuados (propano), que están prácticamente en el 25%", apuntó el PSOE.

"Este coste esán sufriéndolo los ciudadanos directamente en sus bolsillos durante todo el invierno. La medida debe extenderse a estos carburantes y el Gobierno tiene que tener la sensibilidad de que son los carburantes que afectan al conjunto del consumo doméstico", concluyó Pozuelo.