En declaraciones a Servimedia, Arnaldo señaló que la medida de prohibir la gasolina "súper" es acertada porque no le va a crear un grave problema al usuario, aunque sí le vaya a suponer un pequeño encarecimiento de aproximadamente el 10%.

Explicó que el parque automovilístico que actualmente utiliza ese carburante se tiene que dividir entre los coches carentes de catalizador cuyos motores son suscetibles de usar gasolina sin plomo y los vehículos con motores más antiguos que no pueden hacerlo.

En este sentido, el responsable de esta asociación pidió para los propietarios de estos últimos automóviles, que por razones económicas no pueden adquirir uno nuevo, un plan de ayudas a fin de que tengan acceso a vehículos seminuevos, lo cual dinamizaría la situación y rejuvenecería el parque de coches.

En cualquier caso, Arnaldo subrayó que el usuario debe ser consciente de que el destino final de ls vehículos sin catalizador que no pueden usar gasolina "súper" es el desguace y solamente quedará un reducto mínimo de automóviles clásicos o históricos, como ocurre en el resto de los países.