El caso había sido archivado por el juez encargado, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional, Santiago Pedraz, que está de vacaciones y que el pasado 14 de julio, tras haber reabierto el caso, determinó que no procedía el ingreso en prisión de los imputados Ainara Esterán, David Pla y Aitor Lorente, y ordenó el archivo de la causa.

La decisión de Pedraz fue recurrida por el fiscal de la Audiencia Nacional encargado del caso, Ignacio Gordillo, a quien Garzón, que sustituye a Pedraz durante sus vacaciones, ha dado la razón, no sólo decretando que continúe la investigación, sino la prisión de los tres citados imputados.

Según consta en el auto, "a la vista de las circunstancias y hechos indiciariamente acreditados", la prisión de los citados imputados "es la opción más adecuada".

"De no hacerlo así, se pude correr el riesgo más que evidente de que David Pla Martín, Aitor Lorente bilbao y Ainara Eserán Cruz puedan sustraerse en forma inmediata o próxima a la acción de la justicia, ante la gravedad de la imputación", dice Garzón.

Para Garzón, "la información que sobre la víctima transmiten los imputados a ETA reúne todos los requisitos de fiabilidad y concreción exigidos por la ley para poder concluir, al menos provisionalmente, que sin la misma no se hubiera podido cometer el delito".

Entre otras razones, el juez Pedraz alegó que en los archivos informáticos incautados en Francia al dirigente etarra Ibon Fernández Iradi, alias "Susper", detenido en diciembre de 2002 cerca de Bayona (Francia), y que dieron lugar a la reapertura del caso, no se nombra al senador asesinado.

UN DATO BIEN DOCUMENTADO

Sin embargo, tras recordar que en reiteradas ocasiones las informaciones de ETA omiten los nombres de las víctimas, Garzón sotiene que, al ordenar el archivo de la causa, Pedraz no tuvo en cuenta un "dato bien documentado" y es que "la información suministrada a ETA se refiere a una concreta persona a la que acompaña su hijo y que tiene un itinerario concreto. Esa persona luego es asesinada en el concreto itinerario y con su hijo acompañándole".

Giménez Abad fue asesinado cuando se dirigía al Estadio de la Romareda, acompañado de su hijo, para asistir al partido Real Zaragoza-Numancia.

Entre las diligencias que ordena Garzón, se encuentra la citación, para el próximo 4 de septiembre de Borja Giménez Abad, hijo del senador asesinado, para que manifieste si el itinerario habitual de su padre cuando iban al estadio de la Romareda "era el que marca en la información interenida a ETA en Francia".

Según el Ministerio Público, David Pla, Aitor Lorente y Ainara Esterán integraban presuntamente un comando de información de la organización terrorista ETA que actuó en Zaragoza durante el año 2000 y que recopiló datos sobre el senador asesinado y otros políticos aragoneses.

La información recopilada por el comando fue remitida a Francia y sirvió para que la banda terrorista llevara a cabo el asesinato del citado senador.

Estos nuevos datos se conocieron a través de las autoridades judiciales francesas, a raíz del análisis de los ordenadores incautados tras la detención de Ibon Fernández Iradi, alias "Susper", ocurrida en diciembre de 2002 cerca de Bayona (Francia).

Para el fiscal, los imputados tenían información detallada de cómo Giménez Abad acudía cada domingo al citado estadio acompañado de su hijo y qué recorrido hacía, y estos datos fueron trasladados a Francia y eran suficientes para poder perpetrar el asesinato.

"Sin la intervención de David Pla, Aitor Lorente y Ainara Esterán, el asesinato es evidente y claro que no se hubiera podido realizar de la forma en que se llevó a cabo por otros miembros de ETA", mantiene el fiscal.