El ex militar solicitó oficialmente al juez, el pasado día 3, que le permitiera abandonar el país, y alegó que no tiene medios para continuar en España y se siente continuamente amenazado.

Scilingo declaró ante Garzón en el sumario que este juez instruye sobre las desaparición de varias decenas de españoles durante la dictadura argentina, y confesó haber tomado parte en los llamados "vuelos de la muerte", desde los que se arrojaba a los prisioneros al Marde la Plata.

Garzón decidió entonces procesarle y enviarle a prisión con una fianza que no pudo pagar. Finalmente, el juez español rebajó la fianza y le puso en libertad, pero con medidas cautelares consistentes en comparecer cada quince días ante la justicia y la prohibición de abandonar el territorio nacional, por lo que tiene retirado su pasaporte.

Hace sólo unas semanas, Scilingo protagonizó un altercado, cuando uno de sus guardaespaldas, que le facilita el Ministerio del Interior, agredió a na viandante que pertenecía al grupo "Madres de la Plaza de Mayo", por llamarle "genocida".