Visiblemente desmejorado, esposado y con el semblante serio, el empresario Correa, escoltado por agentes de la Policía, abandonó las dependencias del juzgado, a las que llegó a mediodía y entró a declarar sobre la una menos cuarto de la tarde.

Cinco minutos después de que Francisco Correa terminara su declaración, le tocó el turno a Antoine Sánchez, el administrador de la constructora Catalunya Nord Recor, y de Inversiones Kintamani, junto a Pablo Crespo, otro de los detenidos el pasado viernes.

Cinco minutos antes de las tres de la tarde, el empresarioAntoine Sánchez llegó a declarar ante el juez Garzón. Iba también escoltado y esposado, y presentaba un aspecto desaliñado con barba de varios días.

Garzón ha decretado el secreto de sumario sobre este caso, que comenzó el pasado viernes, 6 de febrero, con un registro en las dependencias de las principales empresas supuestamente implicadas y la detención de Francisco Correa, Pablo Crespo (ex secretario de Organización del PP gallego),Antoine Sánchez, Felisa Jordán y Mari Carmen Rodríguez, la única que está en libertad con cargos.

Pablo Crespo es el último de los detenidos que está previsto declare esta tarde ante Garzón. A todos se les imputan delitos de cohecho, tráfico de influencias, blanqueo de capitales, fraude fiscal y asociación ilícita.