Aseguró que, si en el próximo Congreso de la UGT triunfan las tesis que defiende Saracíbar, "yo auguro que incluso a más o menos largo plazo, lo que no consiguió el régimen franquista se consiga desde la UGT: la desaparición de la UGT".

Garnacho defendió una renovación del sindicato basada en la potenciación de las federaciones de sector, que considera disminuidas fente a la Ejecutiva Confederal; combinar la acción reivindicativa con la responsabilización en el Estado del Bienestar; propiciar, desde la independencia, el diálogo con el Gobierno; y una mayor austeridad en la gestión financiera de la central.

Para conseguir esa renovación, no descartó un pacto con otro de los candidatos "in pectore", Manuel Fernández "Lito", secretario general de la Federación del Metal, siempre que acepte los postulados básicos de la regeneración que propone.

Garnacho recrimió a Antón Saracíbar la carencia de contenidos democráticos en su actuación desde la Secretaría de Organización y su espíritu de "más de lo mismo".

Sobre la posibilidad de retirar su candidatura, dijo que la hipótesis de una candidatura de consenso sólo podría darse dentro de las tesis de renovación, porque un eventual triunfo de Saracíbar agravaría la "macroencefalia" de UGT, en referencia al excesivo poder que, a su juicio, tiene la Ejecutiva Confederal.

Añadió que esta misma semana intentaría runirse con "Lito" para cotejar sus respectivos programas y la posibilidad de llegar a acuerdos. A este respecto, recalcó que, si hay acuerdos, exigirá compromisos por escrito.

LITO INSISTE EN EL CONSENSO

Por su parte, "Lito" declaró hoy en Palma de Mallorca que, aunque no ha hecho oficial su candidatura, "si al final me presento será para convertirme en un candidato de consenso. En este momento -añadió- esta posibilidad es más real que hace unos días".

"Lito" reconoció que, en las últimas semans, están recibiendo nuevos apoyos e insistió en que tomará una decisión u otra en función de su creencia de que quien tome el relevo de Redondo debe ser un candidato "fruto del consenso".

A su juicio, sustituir al actual líder de UGT después de 17 años al frente de la Ejecutiva Confederal, es una tarea muy difícil, ya que ha dirigido la central "con carisma suficiente y seriedad necesaria".

En relación a la huelga general, "Lito" lamentó que Felipe González "no quiera negociar", puesto que, en suopinión, "habla de cara a la galería, pero no quiere negociar en serio". Acusó al presidente del Gobierno de convertir a España en el "bazar europeo, adónde van a parar todos los defectos de Europa".

Para el dirigente ugetista, las reformas laborales ya aprobadas por el Gobierno son "una broma de mal gusto que obligan a una huelga general como la convocada".

En concreto, dijo del contrato de aprendizaje, que "es un castigo que los jóvenes deban cobrar sólo 39.000 pesetas por realizar un trabajo qe debería ser pagado con cien mil pesetas".

"Lito", que reconoció tener el carnet de militante del Partido Socialista, declaró que "el socialismo ya no es lo que era" y, sobre la patronal CEOE, señaló que "no es posible entender que su presidente, José María Cuevas, no sea siquiera empresario de nada. Como representante, no es válido".