El tribunal de la Sección Segunda de la Audiencia granadina ha considerado probado que Garfia disparó dos veces su arma contra un brigada de la Benemérita apuntándole a la cabeza a escasos metros de distancia. Después de estas dos detonaciones fallidas, descargóun tercer proyectil en el rostro de su víctima, que sufrió heridas muy graves que le produjeron la incapacidad permanente para realizar su trabajo, además de otra serie de importantes secuelas.

En el momento de la agresión, el guardia civil se disponía a identificar a 'El Garfia', que se había fugado unos meses antes del furgón que le trasladaba a la prisión de Burgos para cumplir una condena de 133 años por el asesinato de tres personas en Valladolid.

Después de la agresión al miembro de la Beneérita, Garfia permaneció durante siete días escondido en un apartamento de la costa, del que tomó alimentos y bebidas, así como una motocicleta que empleó para abandonar la zona.

El condenado se confesó autor de todos esos hechos en la vista oral del juicio celebrada el pasado día 15 de julio. La vista se produjo en medio de un excepcional despliegue de seguridad para evitar que el Garfia pudiera aprovechar cualquier fallo y escaparse.