Según la COAG, los daños causados por estos animales en los dos últimos años superan los diez millones de pesetas. Por su parte, los representantes de la Junta de Castilla y León reconocieron en la reunión que en la provincia soriana existe una importante población de lobos.

El Gobierno regional ha adquirido el compromisode realizar un estudio sobre la situación del lobo en la zona, que también servirá para determinar las pérdidas económicas que han ocasionado.

La COAG mantiene que ha recibido denuncias de agricultores de los municipios sorianos de Hinojosa, Alcubilla de Avellaneda, Espejón, Guijosa, Orillares, Santa María de las Hoyas, Villaciervitos, Vinuesa, Abejar, Muriel la Fuente y Qunitanarejo y de los burgaleses Huerta del Rey, Hinojar, Quintalarraya, Pinilla, Mamolar y Navas.

El presidente de la COAG en oria, Jesús García, manifestó que "no planteamos una guerra abierta al lobo, pero sufrimos los daños y estamos manteniendo con nuestras ovejas una población de lobos".

Según Jesús García, algunos agricultores han tenido que dejar de llevar los rebaños a las zonas más espesas y en algún caso los lobos se han enfrentado a las personas.

Sin embargo, el presidente de la Asociación Soriana para la Defensa de la Naturaleza (Asden), Proceso Lasanta, recordó que el lobo es una especie en peligro de extinión y aseguró que los responsables de los daños que sufren ganaderos y agricultores son los perros asilvestrados que merodean por la zona.