Según informó hoy la compañía, las inversiones en la refinería de Sines irán acompañadas de la creación de 100 nuevos puestos de trabajo. Entre otras novedades, se construirá una nueva unidad de hidrotratamiento de gasóleo pesado.

Asimismo, la empresa anunció la instalación de dos centrales de cogeneración junto a la refinería, con una potencia de 82 MW y que evitará emisiones equivalentes a medio millón de toneladas al año de C02.

Con este proyecto la compañía pretende cubrir los déficits de producción de gasóleo, de naftas y de propano que existen en Portugal, evitando la importación de estos productos, cuya factura equivale a más del 6% de la energía anual que consume el país.

La refinería de Sines, cuyo 30 aniversario se cumple hoy lunes, emplea a 450 trabajadores y tiene capacidad para refinar 220 millones de barriles por día.

El complejo industrial de Galp Energia en Sines dispone actualmente de 27 unidades de proceso para producir gas, gasolinas, gasóleos, fuels, betunes y azufres. Posee una capacidad de almacenamiento de tres millones de metros cúbicos, de los que 1,5 millones corresponden a crudo y el resto a productos intermedios y finales, incluidas las gasolinas reformuladas para su exportación al mercado norteamericano.

En materia logística, la refinería de Sines dispone de un oleoducto multiproducto que enlaza Sines con Aveiras (60 kilómetros al norte de Lisboa) y tiene, en su actual configuración, una capacidad de transporte de cuatro millones de toneladas de productos por año, siendo así el primero de Europa en transportar combustibles líquidos y gases de petróleo licuados.