En declaraciones a Radio Nacional, Gallardón agregó que los contactos entre dirigentes de varias formaciones entran dentro de la vida política. "La verdad es que viviríamos en un país instalado en la intolerancia, si a alguien le extrañase el que dos personas de distintos partidos políticos y de distintas ideas tuviesen conversaciones", dijo.

Por otro lado, Gallardó explicó que el hecho de que el grupo Prisa y el Círculo de Bellas Artes hayan firmado un convencio por el que la vida del segundo girará en torno al primero, sólo puede enmarcarse dentro de una decisión de este organismo privado subvencionada por la Comunidad de Madrid.

Asimismo, señaló que el hecho de que el Círculo de Bellas Artes esté subvencionado por el Gobierno regional no implica que el Ejecutivo autonómico interfiera en la trayectoria de esta institución o de cualquier otra que financie.

"No pretendemos dirigir la política interna del Círculo. Sería un ejercicio absolutamente contrario a la propia Constitución que yo condicionase las subvenciones de la Comunidad a que allí solamente se hablase bien del Gobierno del PP".