La comisión también acordó poner a disposición de Barrionuevo la documentación enviada por el Supremo al Congreso con los testimonios recogidos en el "caso GAL".

La previsión es que los siete diputados miembros de la comisión vuelvan a reunirse el 10 ó 15 de este mes, en función de la celeridad con que Barrionuevo entregue sus alegaciones, que según el presidente de la comisión, el socialista Alvaro Cuesta, es previsible que las envíe por escrito. En esa nuva reunión, la comisión podría tener redactado ya el dictamen de conclusiones que enviaría al pleno.

Cuesta manifestó en rueda de prensa que la voluntad de todos los grupos es que el suplicatorio se tramite, como es habitual, "con agilidad y sin merma de los derechos del diputado". En su opinión, el pleno del Congreso podría votar el suplicatorio la semana del 21 de noviembre.

Cuesta explicó que hoy hubo un acuerdo total para que los diputados miembros de la comisión no hagan declaraciones públics en relación al contenido de las futuras deliberaciones sobre este suplicatorio, aunque sí podrán hacerlo sobre los acuerdos que se adopten en cada caso.