La entrega se hizo en nombre de 150 militantes de Izquierda Unida de Madrid que se han rebelado contra la decisión adoptada por el Consejo Política Federal de IU, que acordó retirar cualquier apoyo político o económico a la organización liderada por Anxo Guerreiro al decidir coaligarse con el PSOE.

Un portavoz de los militantes díscolos de Izquierda Unia de Madrid dijo hoy en Santiago de Compostela, tras convocar a los medios de comunicación, que se sienten miembros de la mayoría de Izquierda Unida y esperan no tener que afrontar sanciones por su apoyo a la coalición progresista en Galicia.