Según la central, "parece que alguna de las partes implicadas, Administración, Galerías Preciados o El Corte Inglés, haya cambiado de idea, cnsiderando más útiles a sus intereses la quiebra de la sociedad".

CCOO cree que sólo una "actuación responsable" de todas las partes puede reconducir esta situación, para evitar un proceso que pone en riesgo la recolocación de los trabajadores de Galerías y la posibilidad de que las personas que no puedan ser recolocadas obtengan unas indemnizaciones mínimamente dignas.

Las garantías a las que se comprometió el Ministerio de Comercio "se están revelando inútiles" para el sindicato, por lo que la egociación, en su opinión, "se está convirtiendo en una carrera de obstáculos, en la que colabora activamente Galerías Preciados, en una actitud que parece más propia de alguien que desea burlar a los trabajadores de Galerías que negociar de buena fe".

A finales de mayo, el Ministerio de Comercio se comprometió a garantizar las condiciones del expediente de extinción de contratos establecidas en el documento titulado "Condiciones laborales a la adjudicación de Galerías Preciados", firmado por los sindcatos Fasga y UGT. Sin embargo, Comisiones Obreras no lo suscribió, por entender que no era más que una declaración de intenciones que no comprometía ni al comprador de Galerías ni a la Administración, lo que a su juicio se está confirmando ahora.