Según informaron hoy fuentes jurídicas, Velázquez Soriano, que acudió a la Audiencia Nacional acompañado por tres personas encargadas de su protección, presentó ante el magistrado varios escritos en los que le anuncia su intención de dejar de seguir colaborando en sus investigaciones sobre el secuestro y asesinato de los presuntos etarras José Antonio Lasa y José Ignacio Zabala.

No obstante, estas fuentes señalaron que la decisión del ex agente de la Guardia Civil n implica que se desdiga de sus anteriores declaraciones, en las que acusó a varios agentes de Intxaurrondo de crear los GAL, sino que no volverá a comparecer voluntariamente para testificar en la causa.

Aunque la razón esgrimida por Velázquez Soriano es su protección, otras fuentes indicaron que el ex agente ha expresado su malestar por las escasas ayudas económicas que está recibiendo desde que fue considerado testigo protegido por el juez Gómez de Liaño, lo que le va a obligar, según su versión, a djar su domicilio.

A su salida de la Audiencia Nacional, Velázquez Soriano no quiso dar explicaciones sobre su comparecencia ante el magistrado, aunque apuntó a que otros testigos protegidos de la causa podrían seguir su ejemplo.

El pasado mes de agosto, Gómez de Liaño dictó un auto por el que solicitó al Ministerio de Justicia que facilitase a Velázquez Soriano y a los otros testigos protegidos del 'caso Lasa y Zabala', como el testigo 1964-S, Pedro Luis Miguéliz, "Txofo", y el policía Angel Lópe Carrillo, una cuantía económica para abonar los gastos que pudiera originarle su protección.

En concreto, el magistrado pidió al departamento que dirige Margarita Mariscal de Gante que asignase a los testigos protegidos la cantidad de 400.000 pesetas en total "para abono de los gastos que pudiera originarle el traslado de domicilio", que Gómez de Liaño consideró necesario para su protección.

Paralelamente, el juez solicitó al Ministerio del Interior que se instensificasen las medidas de proteccin y vigilancia para los testigos "en la forma más adecuada para preservarlos de aquellos riesgos derivados de su estatuto como testigos protegidos" y que se les facilitasen nuevas identidades.

Velázquez Soriano había confesado en una entrevista publicada en "Interviu" en 1986 que él y otros compañeros del Cuerpo habían formado un comando de los GAL que realizó varios atentados.

Sin embargo, cuando fue citado a declarar por un juez sobre dicha entrevista se desdijo de todas sus afirmaciones, aunqu el pasado 7 de mayo reiteró su versión inicial ante el juez Baltasar Garzón y explicó que su rectificación se debió a la paliza que le dieron un grupo de guardias civiles.