La esposa del ex policía cuenta que el 27 de julio de 1990 llega a Bilbao para casarse con Amedo, cosa que hace "después de que diera el visto bueno a la boda el señor Vera (Rafael)".

Durante ese año y a consecuencia del embarazo de la esposa de Michel Domínguez, Alicia Sánchez Carrión, sutituye progresivamente a ésta en el papel de interlocutor de los dos policías con Interior.

El 26 de diciembre conoce a Rafael Vera por primera vez. Tras acudir en repetidas ocasiones "llega un momento en que todo el mundo la conocía, facilitándole sin mayor complicación, recibiendo mensualmente de Juan de Justo mensualmente dos sobres blancos cerrados con papel cello, en los que se incluia una cantidad no fija que fluctuaba entre las 400 y las 600.000 pesetas y que ella entregaba a su marido en prisin para que él distribuyera las cantidades, con las que hacían frente al pago del piso, manutención, facturas, etcétera", dice la declaración de la esposa de Amedo.

Cuenta también que hasta que ella se casa con Amedo, Alicia Carrión era la interlocutora de los dos ex policías con el Ministerio de Interior, através del despacho de Jorge Argote. Antes de trasladarse definitivamente a Bilbao, "en alguna ocasión le pagaron (Interior) los billetes del desplazamiento Bilbao-Madrid, entregándoles dinero unas eces Alicia y otras veces la secretaria de Jorge Argote".

Marian Acedo revela también que Rafael Vera les propuso a los dos matrimonios irse a vivir a Uruguay cuando los ex policías fueran indultados. Le decía Vera que Amedo y Domínguez eran "hombres de Estado que se habían quedado sin profesión, que habían prestado un gran servicio a la patria y al ministerio y qye por eso se merecían una indemnización por pérdida de trabajo, insistiendole que una vez dejara de estar el tema en manos de los jueces y asara a manos políticas, la cuestión estaría inmediatamente arreglada".

La última entrega de fondos se la hizo Juan de Justo en el Hotel Palace en un sobre grande con membrete del Ministerio de Interior que contenía dos sobres cerrados con "las cantidades correspondientes al mes". Esto se produce cuando Vera deja el cargo, pero, no obstante el todavía secretario de Estado para la Seguridad le había dicho a la esposa de Amedo que iba a procurar tener todo arreglado "para que le siguieran cubriendo lasncesidades" (a su cese como `número dos' de Interior).

DOMINGUEZ DIJO NO A UNA VIVIENDA

Por su parte, Alicia Sánchez Carrión asegura que Vera utilizaba con ella una argumentación similar, según revela ésta en su declaración. La esposa de Michel Domínguez relata que el ex secretario de Estado para la Seguridad considera "un tema de Estado" la situación de los ex policías.

"(...) Que no se preocupe y que le ofrece (Vera) la posibilidad de comprarle una casa ya que en aquella época estaban trasladádose de domicilio. La declarante, un tanto sorprendida, le dijo que se lo comunicaría a su esposo, quien no estuvo de acuerdo con que se hiciera esa operación".

Hasta septiembre de 1991, octavo mes de su embarazo, era ella, no la esposa de Amedo, quien llevaba las relaciones con el Ministerio de Interior. Igual que posteriormente Marian Acedo, Juan de Justo entregaba a la esposa de Domínguez dos sobres blancos cerrados con cello con cantidades entre 400 y 600.000 pesetas en cada uno de los sobres.

"Después de septiembre de 1991 fue la mujer de José Amedo la que se encarga de recoger estos sobres hasta que Rafael Vera cesa como secretario de Estado", se incluye en la declaración.

"La última vez que visita a Rafael Vera fue aproximadamente en septiembre de 1991, estando pendiente el recurso de casación de la sentencia (del `caso GAL'), indicándole Vera que había hablado con sus superiores y que a los dos meses de quedar firme la sentencia tendrían el indulto", incluye la declaración de Alicia Sáchez Carrión.

"Preguntada si en alguna ocasión Rafael Vera le sugirió que su marido Pepe Amedo no debía declarar contra sus superiores, contesta: que insistentemente le decían `esto se derrumba, que era una cuestión de Estado y que ellos (los ex policías) también se tendrían que defender'".