Según informaron a Servimedia fuentes jurídicas, Perote precisó al magistrado que transmitió esa información verbalmente a su entonces superior el día 18 de diciembre de ese año y añadió que no comunicó a Manglano el nombre de la persona contra la que los GAL iban a atentar dado que lo desconocía.

Al día siguiente de producirse esta comunicación de Perote, un comando de los GAL disparó varias veces contra Oñaederraen el bar "Kaiette", de Bayona, donde trabajaba, produciéndole la muerte. Según publicó recientemente el diario "El Mundo", dicho comando estaba formado por guardias civiles.

Tras estas afirmaciones, no se descarta que el juez Garzón pueda llamar a declarar en relación a este asesinato a Manglano quien, al igual que Perote, está imputado en la causa que instruye el magistrado por el atentado de los GAL contra el Hotel "Monbar" de Bayona, en el que murieron cuatro personas.

Además, Perote, que comareció por espacio de dos horas ante el juez Garzón en relación al sumario que instruye sobre el asesinato de Oñaederra, describió al magistrado las armas que, según su versión, facilitó el CESID a los GAL.

ARMAMENTO

Las fuentes consultadas por esta agencia señalaron que el ex jefe del Grupo Operativo del CESID aseguró que este organismo entregó dos subfusiles "HK" a los GAL, aunque indicó que dichas armas no fueron empleadas por esa organización para ninguna acción ilegal. Perote negó, sin embargo,que los servicios de información suministrasen explosivos a los GAL.

En su declaración ante el instructor del 'caso GAL', Eduardo Móner, del pasado día 22, el coronel ya reveló que el CESID había facilitado por orden de Manglano información y armamento a esa organización, aunque entonces no precisó ni el destinatario de dichas armas ni su empleo, acogiéndose al deber de secreto.

Además, afirmó que él personalmente entregó dicho armamento y agregó que también participó en alguna operación para faclitar información.

Durante su comparecencia de hoy, que forma parte de las primeras diligencias que realiza el juez Garzón en relación a este atentado, Perote no entregó al magistrado ningún nuevo documento, de acuerdo con las citadas fuentes.

El coronel, que se encuentra actualmente en la prisión militar de Alcalá de Henares por orden del juez Jesús Palomino, prestó su declaración ante Garzón en calidad de testigo, por lo que su abogado, Jesús Santaella, no pudo estar presente durante la diligenia.

Al término de la comparecencia, el letrado pudo despachar durante unos minutos con Perote, quien le explicó el contenido de su declaración, antes de que éste fuera conducido de nuevo a la prisión militar, aunque no quiso desvelar a los informadores los términos de la misma dado que el sumario se encuentra declarado secreto desde el pasado martes.

Perote, que comenzó su comparecencia pasadas las 11 de la mañana, fue custodiado en su desplazamiento desde la prisión militar por un coronel, dado ue la ley castrense prevé que los detenidos deben ser acompañados por un militar de igual o superior rango.

Según dijeron fuentes jurídicas, en esta ocasión la persona encargada de custodiar a Perote fue el director de la prisión en la que el ex agente del CESID se encuentra ingresado, debido a que no había disponible ningún otro militar con rango de coronel que pudiera realizar el traslado del detenido.