Se trata de Julio Hierro, Francisco Saiz Oceja, Juan Ramón Corujo y Luis Hens, acusados por Garzón de participar en el secuestro de Marey, ocurrido en 1983.

Los cuatro policías llegaron a la Audiencia Nacional pasadas las siete y media de la tarde, a bordo de un autmóvil, y entraron por la puerta del garaje, ocultando sus caras a los fotógrafos y cámaras con periódicos.

La decisión de estos cuatro policías de colaborar con Garzón se produce después de que el pasado fin de semana prestara testimonio ante el juez el ex jefe superior de Policía de Bilbao Miguel Planchuelo, quien habría implicado en el "caso Segundo Marey" a la cúpula de Interior de la época, que estaba dirigida por el ministro José Barrionuevo.

Garzón podrá completar el 'rompecabezas' del "cas Marey" con la declaración que mañana prestará Francisco Alvarez, ex jefe del mando único antiterrorista, y posiblemente con el testimonio de Julián Sancristóbal, ex director de la Seguridad del Estado. Sancristóbal podría prestar declaración esta misma noche, si bien no había hecho acto de presencia pasadas las 21 horas.