En concreto, en la misiva, recibida el pasado día 27 por Anguit a través del fax, Miquel, procesado en España por esos hechos, afirma que a él se le indujo a ese asesinato "en las mismísimas dependencias del ministerio del Interior y que 'él' y nadie más que 'él' (Barrionuevo) dirigía; y no por el portero, no, sino en el despacho de Paco Alvarez, uno de sus más directos subordinados y más leal colaborador".

Añade que, con su carta, quiere que los electores "sepan de lo que estos asesinos son capaces: organizar la muerte de una persona inocente y destrozar la vidade otras ocho familias para engañar a todos los españoles y al Gobierno francés con la farsa que montaron luego con inmediata detención del grupo que ellos mismos me instigaron a formar".

Por estos hechos, fueron detenidos y posteriormente condenados por la Audiencia Nacional José Luis Fariña, Javier Rovira, Jorge Porta y Carlos Pedemonte, que formaban el comando que asesinó a Caplanne tras confundirle con un etarra. Este comando estaba dirigido por Miquel, quien fue procesado en rebeldía por estos hehos aunque no juzgado ya que huyó de España.

Esta misiva fue entregada hoy en el Alto Tribunal por el coordinador del Grupo Parlamentario de IU, Angel García Castillejo, junto a un escrito, dirigido al instructor del 'caso GAL', Eduardo Móner, en el que la coalición indica que del contenido de la carta se deduce que Miquel reconoce su pertenencia a los GAL y muestra su voluntad de prestar declaración.

Tras realizar este trámite, García Castillejo explicó a los periodistas que una vez verificada l autenticidad de la autoría de la carta, IU tomó la decisión "en aras a la transparencia y actitud de colaboración con la justicia" de entregarla al Tribunal Supremo, al implicar la misma a una persona aforada, José Barrionuevo, quien está procesado en el 'caso GAL'.

Indicó que si presentan ahora, a dos días de las elecciones, dicha carta en el Alto Tribunal es porque "sería incorrecto desde el punto de vista jurídico y legal, incluso punible, el que por parte de IU, un documento de estas característias y de esta relevancia, fuese retenido".

Por ello, agregó, "en aras a la colaboración con la justicia, a la que estamos obligados todos los ciudadanos y también las formaciones poliicas, es por lo que hacemos entrega de este documento a la justicia española y al Tribunal Supremo".

Dijo que la coalición se ha limitado a verificar la autenticidad del escrito, no entrando a analizar su contenido ya que, a su juicio, corresponde al Tribunal Supremo investigar los hechos.

En su opinión, ante las"gravísimas imputaciones" que Miquel hace en su carta hacia Barrionuevo y Alvarez, "lo adecuado sería que se le pudiera terminar tomando declaración" al miembro de los GAL, quien afirma tener pruebas de las acusaciones que formula.

El dirigente de IU no descartó que una de las finalidades de Miquel con su carta sea salir de la prisión en la que está, ya que, posiblemente "a la vista de las duras condiciones penitenciarias de Tailandia, este señor vea una posiblidad de trasladarse a España o de poder pestar declaración desde allá y ver en alguna medida relajada su situación actual".

Asímismo, señaló que también es posible que la situación en la que se encuentra Miquel sea la que le haya animado a prestar declaración sobre estos hechos criminales.

Fuentes judiciales explicaron que, una vez que Móner reciba la misiva, el magistrado podría remitirla a la Audiencia Nacional, dado que los hechos relatados en la misma no guardan relación con la causa que instruye sobre el secuestro de Segundo Marey,sino que en su día fueron investigados por el juzgado central de instrucción número 4 de la Audiencia Nacional, cuyo titular es el juez Carlos Dívar.

Indicaron que éste, a la vista del contenido de la misiva en el caso de que le sea remitida, podría acordar reabrir la causa contra Miquel, para lo que un primer paso sería que éste se ratificase en sus acusaciones, lo que podría hacerse a través de una comisión rogatoria.