Para Beltrán, "el Ejecutivo está interfiriendo en la Justicia", cuando asegura que no hará caso del plazo impuesto al Ejecutivo por el juez de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón, para entregarle los papeles del CESID relacionado con el "caso GAL", y que finaliza mañana.

Arturo Beltrán señaló que "el resultado objetivo es una interferencia, un retraso en la administación de justicia por parte del Ejecutivo. Si se está sospechando del poder Ejecutivo y sus aledaños y el poder Ejecutivo pone chinitas en el camino, es como para que se incrementen las sospechas".

En su opinión, es "una paradoja sonrojante en democracia" que el Gobierno, "el investigado, sea el que pueda declarar cuando un papel es o no secreto. Lo que no tiene sentido es que el Ejecutivo diga que esto es secreto porque yo lo declaro cuando a mí me afecta o puede afectarme".

Para la Unión Judicil Independiente, el juez Garzón "está en su deber de investigar. Cuando un juez investiga un caso no lo hace por un placer o por un interés personal, sino defendiendo intereses colectivos".

Beltrán explicó que si se acaba en un conflicto de jurisdicción, probablemente no se podrá argüir que "no hay materia, que no hay contenido". Es decir, el Gobierno se puede "escudar" en que no hay competencia administrativa y sí política.

En definitiva, el Ejecutivo siempre podrá decir que, "frente al deber ola competencia judicial para investigar los delitos está la competencia gubernamental de orden político para dirigir la política nacional y en su seno la existencia de secretos es importante", por lo que no se mostró muy optimista al respecto.