GAL. GARCIA-CASTELLON ACEPTA LA RECUSACION DE BUEREN PORQUE SU RELACION CON VERA PUEDE SE USADA PARA CUESTIONAR SU IMPARCIALIDAD
- Bueren reconoce amistad hacia Garón, pero dice que no afecta a su imparcialidad
- Niega "amistad íntima" hacia Vera aunque afirma que le profesa aprecio personal y profesional
- Explica que si se hubiera abstenido de resolver la recusación de De Justo parecería que tenía un injustificado propósito de apartarse
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
El juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón acordó hoy aceptar la recusación promovida contra el magistrado Carlos Bueren por el ex secretario de Estado para la Seguridad Rafel Vera, que alegó la amistad íntima de aquel hacia Baltasar Garzón y hacia él mismo.
En un auto hecho público hoy, el juez García-Castellón se basa para dar el visto bueno a la recusación de Bueren en el informe emitido por éste ayer en el que aceptó la recusación promovida contra él por Vera basándose en que sus relaciones con el ex cargo de Interior podrían ser utilizadas por las partes para cuestionar su imparcialidad en las resoluciones que pudiera adoptar en el proceso.
De este modo, GarcíaCastellón pasa ahora a resolver la recusación presentada contra Garzón por Vera, basada en su interés directo en la causa, la "enemistad manifiesta" del juez hacia el ex secretario de Estado para la Seguridad y en la querella que éste tiene presentada contra el magistrado en el Tribunal Supremo por torturas y coacciones a su ex secretario personal Juan de Justo y por filtración del sumario.
DISCREPANCIAS
En su informe, Bueren rechaza que su amistad con Garzón afecte a sus resoluciones judiciales y pecisa que mantiene con éste discrepancias jurídicas "que revelan la independencia de sus criterios a la hora de resolver cuestiones concurrentes en otros asuntos", pero agrega que éstas son habitualmente desconocidas y no trascienden al exterior".
Matiza que el cuestionamiento de su imparcialidad "no existía con anterioridad a este acto, es decir, cuando se planteó por Juan de Justo en su demanda de recusación ni tampoco en proceso anterior diferente". "Por ello, este instructor, consciente de su impacialidad, resolvió la recusación anterior", destaca Bueren quien insiste en que "la imparcialidad se mantenía y se mantiene a pesar de la amistad".
Explica que si se hubiese abstenido de la resolución de la anterior recusación de Garzón "lejos de toda prudencia hubiese aparentado por mi parte, entonces, tener un injustificado propósito de apartarme de la resolución de la cuestión en lugar de intentar exclusivamente poner fin a un litigio trascendente y de urgente respuesta".
Para Bueren, ahora "n siquiera ha habido lugar a que este instructor pudiera plantearse la concurrencia de causa de abstención" para resolver el nuevo incidente contra Garzón "por la simple razón de haber sido recusado antes de haberse hecho cargo de la causa".
Respecto a la "amistad íntima" hacia Vera invocada por éste como motivo de recusación, dice que aunque no puede "aceptar en rigor como cierta" dicha causa, señala que debe informar favorablemente a su abstención.
RELACION PROFESIONAL
En este sentido, detallaque ha mantenido con Vera una prolongada relación profesional, derivada de los cargos públicos desempeñados por cada uno que "generó con el tiempo el consiguiente aprecio personal y profesional, relevante a estos efectos que se debaten".
No obstante, aunque matiza que la aducida amistad íntima no concurre, afirma que puede ser "razonablemente" cuestionada por las partes al no carecer de fundamento "en la medida en que pueda afectar a la valoración, desde el punto de vista de imparcialidad, de las resouciones que pudiera adoptar en el proceso".
Por ello, añade que conviene "ser prudentes" ya que "en la situación actual cualesquiera que fueran las resoluciones que adoptara este instructor en el proceso incidental o en el principal podrían ahora ser cuestionadas, por parciales, a conveniencia de las demás partes y la prematura recusación ha impedido a quien ahora informa haber lugar siquiera a plantearse la posiblidad de la abstención".
PLAZOS
Ahora, Garzón dispone de tres días, tal como señal García-Castellón en su auto, para emitir a su vez un informe sobre la recusación presentada contra él por Vera. Si el magistrado acepta las causas de recusación y se abstiene, lo que no parece probable, el juez del 'caso Banesto' procederá a resolver el incidente sin más trámites.
Por el contrario, si Garzón rechaza su recusación, García-Castellón tendrá 10 días para practicar las pruebas que se hubieran solicitado y resolver tras pedir un informe al fiscal. Entre dichas pruebas podría figura la tomade declaración al ex ministro de Interior José Barrionuevo, el ex fiscal general del Estado Eligio Hernández, la ex delegada del Gobierno en Madrid Ana Tutor y al diputado del PSOE José María Mohedano, citados por Vera como testigos de la "enemistad manifiesta" que Garzón le profesa.
(SERVIMEDIA)
11 Feb 1995
S