González, que considra disparatadas las acusaciones de Damborenea, recalcó que la peseta está ahora mejor que cuando se devaluó por última vez, y también se mostró confiado en que las dificultades políticas no influyan en las tareas de la presidencia de la Unión Europea.

En cuanto a su posible sucesión como líder del PSOE, dijo que es indudable que esa cuestión está abierta y que hay un periodo de reflexión al respecto.

González cree que las acusaciones de Damborenea obedecen a una estrategia de defensa y señaló a ls periodistas que ahora comienza a entender por qué se ha hablado tanto en los últimos días de la posibilidad de una ley de punto final para los implicados en el GAL. La estrategia consistiría en implicar a responsables políticos al más alto nivel posible para forzar la aplicación de una medida de gracia de esas características.

Sobre la posibilidad de convocar elecciones anticipadas, se mostró convencio de que ésa es una de las cosas que se buscan con estas denuncias. También indicó que no siente tracionado por García Damborenea porque no tuvo mucha relación con él, ni siquiera cuando era dirigente del PSOE.

El presidente dijo que el Gobierno estudia emprender acciones legales contra Damborenea, si bien dio a entender que es posible que esa iniciativa no prospere porque se intentó algo parecido ante las declaraciones del ex policía José Amedo, pero los expertos argumentaron que ya había un proceso abierto.

Ante la posibilidad planteada por los periodistas de que García Damborenea actúe por rsentimiento, invitó a los informadores a leer las hemerotecas y recordó que el dirigente socialista ha pedido posteriormente el voto para el PP.