Las juntas de tratamiento de las prisiones en las que fueron internados estos tres ex policías han adoptado esa decisión aplicando l artículo 86.4 del actual Reglamento Penitenciario, que permite, en el caso de reclusos en tercer grado, sustituir la obligación de pernoctar en prisión por determinadas comparecencias ante las autoridades correspondientes, que conjuguen las exigencias de seguridad personal de los reos.

De este modo, Instituciones Penitenciarias decide otorgar a los ex policías el mismo tratamiento que ha dado al ex ministro de Interior José Barrionuevo, al ex secretario de Estado para la Seguridad Rafael Vera, al exdirigente socialista Ricardo García Damborenea, el ex jefe superior de Policía de Bilbao Miguel Planchuelo y el ex gobernador civil de Vizcaya Julián Sancristóbal.

Instituciones Penitenciarias ha tenido en cuenta que se trata del primer delito por el que han sido condenados, la "sustancial" reducción de la condena, el hecho de que los ex policías se hayan presentado voluntariamente para cumplir el castigo impuesto por los tribunales y el "largo periodo" de tiempo transcurrido desde el secuestro de Mary.

Asimismo, consideran que la vida normalizada que han llevado hasta el día de hoy, sin intentar fugarse, su integración sociolaboral, su dificultad "objetiva" de reincidencia, y la necesidad de garnatizar su seguridad personal son otros factores que han contribuido a la decisión.

La Dirección General de Instituciones Penitenciarias estudiará mañana la situación del último de los condenados que aún queda por clasificar, el ex policía Luis Hens.

El resto de los condenados, Francisco Alvarezlos ex policías José Amedo y Michel Domínguez, se encuentran actualmente en libertad condicional y no tuvieron que reingresar en prisión, dado que ya han cumplido dos terceras partes de la pena impuesta por el Supremo.

Alvarez, que saldará su deuda penitenciaria el próximo 11 de julio, fue el único de los condenados por el secuestro de Segundo Marey que decidió cumplir los tres años y dos meses en que quedó reducida su pena tras el indulto parcial concedido a diez de los implicados en el rapto por elGobierno de José María Aznar en diciembre de 1998.

Los ex policías José Amedo y Michel Domínguez, condenados a 9 años y medio de prisión y a dos años, cuatro meses y un día de cárcel, respectivamente, fueron los únicos que no se beneficiaron de esta medida de gracia, otorgada en diciembre de 1998.