"La gente debe respetar la decisión del Supremo como nosotros hubiéramos respetado una decisión contraria a la adoptada", recalcó.

Según Benegas, "muchas de las manifestaciones que se hacen denotan un interés no jurídico, pues no analizan si había o no había base para imputar a determinadas personas, sino una intencionalidad política", para concluir que "hay un lamento político porque Felipe González n haya sido imputado".

Sobre la situación vasca, Benegas manifestó que "la búsqueda de la paz no debe significar que vulneremos principios democráticos y debe tener unos límites. Se puede cambiar la política sobre los presos de ETA, pero no bajo el chantaje", dijo antes de precisar que "no debe haber oferta de diálogo ni de mediación sin que se diga con claridad por parte de todos que antes ha de cesar la violencia".

En torno a la política autonómica, Benegas señaló que "esto se le empieza a ir delas manos al Gobierno, porque no tiene un proyecto nacional y no ha querido buscar un gran pacto de Estado". Insistió en que "no se puede ceder a todas las exigencias de los nacionalistas. Si cada visita de Pujol cuesta 15.000 millones, empezará a haber problemas serios en este país".