En declaraciones a Servimedia, Anasagasti afirmó que "no tengo ningún elemento de juicio concreto, pero los que vivimos en Euskadi veíamos que todas aquellas soflamas, toda aquella militancia, todo aquel celo que el tenía no era una situación normal de un político en activo que lucha contra el terrorismo".

A su juicio, la situación de hoy demuestra que había "algo más" que palabras en los ataques de Damborenea y que el PNV "siempre ha tenido la gran sospecha de que RicardoGarcía Damborenea era uno de los impulsores del discuros más radical, más dañino, desde el punto de vista democrático, en la lucha contra el terrorismo".

El dirigente peneuvista no cree, sin embargo, que el hecho de que Damborenea sea un ex alto cargo socialista conlleve repercusiones políticas "porque es una personalidad tan suya y, sobre todo tan apabullante. Ahora está con el PP, antes con el PSOE, pero fundamentalmente siempre ha estado con él mismo. DE manera que yo no lo enfocaría desde el puntode vista del PSOE".