El popular locutor, que hoy compareció en la Comisión Constitucional del Congreso para hablar de la cláusula de conciencia y del secreto profesional de los periodistas, dijo que los jóvenes periodistas que acceden a la profesión con un contrato de tres meses tienen menos interés en acercarse a la realidad y ser útiles a la sociedad que en ver la manera de ómo quedarse finalmente en ese medio.

Gabilondo aludió igualmente a un fenómeno que, en su opinión, ha cobrado fuerza en los últimos años, según el cual "el éxito es el gran justificante de todo".

El periodista explicó que el éxito se ha convertido en la "bendición final" que legitima un trabajo, lo que representa una amenaza para el ejercicio del periodismo, a pesar de que este peligro no es observado así por los profesionales.

Respecto a la cláusula de conciencia, Gabilondo se mostró partiario de que haya una ley que regule este derecho, aunque dudó de su efectividad, ya que, a su juicio, puede estar condenada a una "retórica y romántica" referencia, en un mundo en el que se imponen las reglas de la industria periodística.

MEJOR LEY LA QUE NO EXISTE

Por su parte, el responsable de Deportes de la Cadena Cope, José María García, quien también compareció en la citada comisión, quiso dejar claro que la mejor ley es la que no existe, por lo que no consideró necesario una norma que desarrole el secreto profesional y la cláusula de conciencia.

En cambio, García sí consideró imprescindible dotar a los periodistas que dan informaciones veraces y contrastadas de unos mecanismos de protección para que puedan ejercer su profesión sin ningún tipo de cortapisas.

El periodista vinculó la independencia de los informadores con la buena marcha económica de los medios de comunicación y subrayó que en España hay buenos profesionales, pero faltan empresas que los puedan sustentar.

Tras señaar que la prensa no es el cuarto poder porque los periodistas "somos una mierda", García calificó de básico el respeto al secreto profesional.

Para ello, puso como ejemplo la reciente entrevista a Luis Roldán publicada por "El Mundo" y dijo que los informadores cumplieron con su obligación y no tienen por qué revelar dónde está el ex director de la Benemérita.