"No estamos pensando en una ley de las mismas características que la del tabaco, pues no se trata de restringir el consumo con carácter general, sino de atender a los focos de problema que nos han indicado las familias, por un lado, y las autoridades, por otro", declaró Salgado en rueda de prensa.

Estos problemas, explicó la ministra, están en los consumos abusivos de la población adulta y en todos los consumos de los menores. En este sentido, reiteró que, aunque la venta a menores está prohibida en todas las comunidades autónomas, salvo en Asturias y en La Rioja, la realidad es que los adolescentes adquieren y consumen bebidas espirituosas.

Para concretar estas medidas, Salgado dijo que su departamento realizará estudios y encuestas que indiquen "qué es necesario instrumentar" exactamente y que confirmen o desmientan la sospecha de que el alcohol influye a veces en el fracaso escolar.

De momento, precisó, el Ministerio de Sanidad está iniciando conversaciones con los sectores implicados en este problema: las familias, la comunidad educativa, los ayuntamientos y los profesionales sanitarios, que pueden ayudar a definir cuándo un consumo es problemático en la población adulta.