CCOO espera que el Gobierno debata el proyecto de ley de Salud Laboral en Consejo de Ministros este mes de febrero y que "a lo largo de 1992, salgan tanto la Ley como el Reglamento", según Moreno.

El mismo responsable sindial calificó el anteproyecto de "un avance notable, un instrumento vital, aunque manifiestamente mejorable".

"Consideramos los problemas de salud laboral como desgaste obrero y no sólo como enfermedades profesionales o accidentes de trabajo", señaló, por su parte, Angel Carlos Cárcoba, responsable del Gabinete de Salud Laboral de CCOO.

Cárcoba aseguró que ese desgaste "se manifiesta muchas veces de forma inespecífica, aunque no por ello menos grave. Entre los indicadores del desgaste podríamos citr la incapacidad para las actividades habituales, el envejecimiento prematuro, mortalidad precoz...".

ACCIDENTES MORTALES

Por otra parte, España se llevó en 1991 el 25 por ciento de los accidentes mortales ocurridos en la Comunidad Europea (unos 1.700 en el centro de trabajo, a los que habría que añadir 600 más en los desplazamientos).

En cuanto a las enfermedades de los trabajadores españoles, CCOO calcula que, "además de los sufrimientos y costes en salud, las pérdidas económicas que estos trbajadores ocasionan anualmente pueden calcularse en no menos de 400.000 millones de pesetas".

El sindicato estima que, además, la Administración no desempeña adecuadamente la función de vigilancia y sanción contra las empresas que no cumplen la normativa de seguridad y salud laboral.

Los inspectores de Trabajo levantaron el año pasado más de 25.000 actas de infracción e impusieron sanciones que superaban los 3.500 millones de pesetas. "No llega al 15 por ciento el pago de estas sanciones", asegur Cárcoba.

"Creemos que la sanción no es la mejor medida para acabar con este deterioro de las condiciones de trabajo, pero cuando la sanción no cumple el objetivo de ejemplificar, se prepara un excelente abono para alimentar la sensación de impunidad. Hay normas que facilitan una serie de apelaciones que no sirven para dar más garantías de justicia, sino para hacer casi inútil la tarea de inspección", afirma CCOO.

INSPECTORES DE TRABAJO

Además, de los 516 inspectores que existen a escala nacionl, sólo 350 se dedican a realizar visitas a centros de trabajo, donde tienen que controlar el cumplimiento de la legalidad referida a Empleo y Seguridad Social (contratos, cotizaciones, altas, bajas, jornada, salarios, etc.), mediación y conflictos laborales, además de seguridad e higiene.

Según CCOO, a cada inspector le correspondería visitar más de 27.000 centros de trabajo al año y tendría que controlar a más de 246.000 trabajadores.

Un informe elaborado por este sindicato sobre el "Desgaste píquico en el trabajo" señala que en España se registra un incremento medio anual de 250 casos de suicidio en los últimos 10 años, situándose la cifra de 1990 en más de 3.000 casos. Entre 1983 y 1987, los suicidios aumentaron en un 37 por ciento en las zonas de España que sufrieron reconversión industrial.

Segun el Gabinete de Salud Laboral de CCOO, en los últimos 20 años las enfermedades coronarias han aumentado el 80 por ciento y los estados de ansiedad, depresión y alteraciones cardiovasculares se dn un 48 por ciento entre personal con contrato temporal, mientras que entre los fijos sólo alcanzan el 15 por ciento.

El Comité Mixto OIT-OMS estima que entre un 5 y 10 por ciento de la población activa de los países europeos sufre trastornos graves debidos al estrés laboral, "lo que significa que, en España, más de un millón de trabajadores padecen enfermedades mentales provocadas por el trabajo, incrementándose específicamente entre la población más joven", asegura CCOO.