De esta forma, el equipo madrileño iguala el mismo resultado que el año pasado en la máxima competición europea de clubes, que ganó en 1997.

El partido entre el Fundosa ONCE y el Santa Lucía Sport no ofreció un gran baloncesto para los aficionados, al ser un duelo muy defensivo entre ambas escuadras.

Los italianos se adelantaron con un parcial de 0-8 en los primeros cinco minutos, pero enseguida los españoles igualaron el marcador para después ir por delante con pequeñas ventajas durante gran parte del resto del encuentro.

Después del 9-10 del primer cuarto, los madrileños, gracias a la buena dirección del base Rafael Muiño y al acierto del ala-pívot estadounidense Joshua Turek, controlaron el "tempo" del juego sin lograr mayores diferencias que los siete puntos conseguidos en las postrimerías del tercer cuarto (33-26, minuto 28).

El Santa Lucía Sport volvió a darle la vuelta al marcador a seis minutos para la conclusión, con una canasta del pívot israelí Lior Dror. Desde entonces, el partido fue un toma y daca constante en el que cualquiera de los dos equipos podía hacerse con la victoria.

A falta de un minuto para la conclusión, el Fundosa ONCE vencía por 41-40. El pívot italiano Alberto Pellegrini aventajó a los transalpinos a unos 30 segundos para la conclusión y Dror falló después dos tiros libres.

El Fundosa ONCE tuvo una última posesión de sólo cuatro segundos para vencer en el partido por el quinto y sexto puesto de la Copa de Campeones.

Muiño puso el balón en juego, que recibió el ala-pívot australiano Brett Stibners, quien anotó un triple sobre la bocina que alegró a los numerosos aficionados españoles que jalearon a sus jugadores durante todo el encuentro.

Joshua Turek y Rafael Muiño fueron los máximos anotadores del Fundosa ONCE, con 15 y 11 puntos, respectivamente, por los 14 de los israelíes Lior Dror y Roei Rozemberg para el Santa Lucía Sport.

El equipo italiano defendía el título de la Copa de Campeones logrado el año pasado en Sheffield (Gran Bretaña), pero esta vez ha caído al sexto puesto, mientras que el Fundosa ONCE repite el quinto de 2007 y se consolida, una temporada más, como uno de los mejores equipos de Europa de baloncesto en silla de ruedas.