LAS FUNDACIONES ESPAÑOLAS DEBEN TENER MAS VOCACION EMPRESARIAL Y AUMENTAR SU TRANSPARENCIA, SEGUN UN ESTUDIO

- La Asociación Española de Fundaciones analiza el papel social de estas entidades con motivo de su I Conferencia

MADRID
SERVIMEDIA

Las fundaciones españolas deben gestionarse con un espíritu más empresarial y reforzar la transparencia de sus actividades ante los poderes públics y la sociedad.

Así se desprende del estudio "El papel de las fundaciones en la sociedad española", que hoy presentó en rueda de prensa la Asociación Española de Fundaciones (AEF) con motivo de su I Conferencia General, que celebrará el próximo lunes.

Esta asociación agrupa a 636 entidades y surgió el pasado mes de enero de la fusión de las hasta entonces dos organizaciones mayoritarias del sector, la Confederación Española de Fundaciones (CEF) y el Centro de Fundaciones (CF).

El secretariogeneral de la AEF, Carlos Paramés, señaló que la gestión empresarial y la transparencia están, según el estudio, a la cabeza de las asignaturas "pendientes" de las fundaciones.

Sin olvidar su carácter no lucrativo, las fundaciones españolas del siglo XXI han de tener equipos directivos profesionalizados, con una clara "vocación empresarial" presidida por la innovación y el riesgo, que les permita irrumpir en ámbitos desatendidos por el Estado y por el mercado.

También tienen que tener en la transarencia y la información a las Administraciones y los ciudadanos como aspectos esenciales de su actividad. "Si quieren ser creíbles y merecer beneficios fiscales, deben ser transparentes e imparciales en la asignación de sus becas y ayudas", señaló Paramés.

El informe también mira hacia Iberoamérica y señala que las fundaciones españolas deben tener a esta región del planeta como una referencia de primer orden y dirigir a ella una parte significativa de su acción internacional.

La directora de laAEF, Teresa Sanjurjo, afirmó que las nuevas leyes de Fundaciones y Mecenazgo que se han aprobado en esta legislatura han sido muy bien recibidas por el sector porque aportarán "más flexiblidad y menos burocratización".

La asociación está ahora muy interesada en que del reglamento que desarrolle la Ley de Fundaciones salga una buena coordinación entre los diferentes registros de fundaciones y para ello ya le ha hecho llegar sus sugerencias al Ministerio de la Presidencia.

Con vistas al futuro, Sanurjo comentó que las principales aspiraciones de las fundaciones en materia fiscal son lograr un aumento de los incentivos al mecenazgo y recortar el IVA que se aplica a las fundaciones.

La AEF no dispone de datos actualizados sobre las grandes cifras del movimiento fundacional español y se remite a los estudios que se han hecho en los últimos años tanto en Europa como dentro del país.

Paremés recordó el macroinforme de la Fundación de Bertelsmann de 2001 que situó a España como séptima potencia uropea en número de fundaciones, con unas 6.000, por detrás de países como Suecia, con 20.000, Dinamarca (14.000) o Reino Unido, Alemania y Suiza (8.000).

De esas 6.000 fundaciones españolas, el 60 por ciento corresponde a entidades docentes, de acción social y culturales (cada una de las tres con ratios en torno al 20 por ciento). La mitad de estos colectivos están en Madrid y Cataluña.

En virtud de cifras correspondientes a 1997, las fundaciones docentes son las que mueven más dinero, unos 700 illones de euros de aquel año, seguidas de las culturas y las de asistencia social.

(SERVIMEDIA)
19 Nov 2003
JRN