Según la memoria del año pasado, los 10 centros que mantiene abiertos la FSD en otras tantas ciudades españolas acogieron o informaron a 6.632 mujeres, el 57 por ciento menores de 36 años (el 19% con menos de 25 años). En 1990, el número de asistencias fue de 5.300.

El 13 or ciento del colectivo ayudado en 1991 (860 mujeres) sufrió malos tratos con lesiones y una de cada dos mujeres maltratadas padecía las agresiones "frecuentemente".

La mayoría de las afectadas (58 por ciento) declaró que los malos tratos comenzaron al iniciar la convivencia y, sobre los motivos de éstos, una de cada cinco dijo que se producían "cuando bebe".

Un factor determinante en la vida de estas mujeres es su bajo nivel de estudios (el 75 por ciento cursó Enseñanza Primaria, el 18 por cient sabían "leer y escribir" y un 3 por ciento se declararon analfabetas).

La escasa formación es una de las causas de que, o bien no posean un puesto de trabajo (el 38 por ciento eran amas de casa) o bien tengan empleos marginales, como el servicio doméstico y la limpieza, donde trabajaban el 27 por ciento de las atendidas.