Carcedo explicó que Inserta Empleo cuenta con oficinas por toda España, “algunas de ellas en zonas dispersas y de marcado carácter rural, en las que nos resulta complicado llegar a las mujeres con discapacidad”, dijo.

Así, añadió que “gracias a la colaboración con Afammer estamos avanzando para luchar contra la triple discriminación a la que se enfrentan (por ser mujer, tener discapacidad y vivir en el entorno rural) y que las dificulta el acceso al empleo”.

Por su parte, Quintanilla expresó la importancia que este convenio tiene a la hora de alcanzar la igualdad de oportunidades en el medio rural. Asimismo, destacó que volverán a poner a disposición de Fundación ONCE e Inserta Empleo la gran red, el conocimiento y la experiencia de Afammer a la hora de ofrecer oportunidades a las mujeres rurales y proteger a las que sufren violencia en los pequeños municipios.

“Hablamos de mujeres que quieren ser libres, pero no podrán serlo sino cuentan con acceso a la formación y al empleo. Y en el caso de las que tienen discapacidad no saldrán de esta situación si no tienen empleo”, aseguró Quintanilla.

El acuerdo también contempla el desarrollo de acciones formativas para mujeres con discapacidad, la prestación de servicios (jurídicos, informativos e intermediación laboral), la mejora de las prácticas profesionales, así como la promoción de acciones conjuntas de difusión y sensibilización social.