La firma de este convenio, que estará vigente hasta el31 de diciembre del año 2000, servirá para coordinar las actividades que han venido realizando estas entidades y para definir un marco de colaboración conjunta que haga más fácil la consecución de los objetivos comunes perseguidos por ambas partes.

Tanto la Fundación ONCE como CEPES han coincidido en la necesidad urgente de aunar esfuerzos y poner en marcha de forma conjunta programas y acciones que faciliten la integración de las personas con minusvalía, debido a las dificultades de este colectivo paa acceder al mercado laboral en condiciones de igualdad.

El contenido del acuerdo, suscrito en la sede del Consejo Económico y Social, se extenderá a la promoción de la formación y el empleo de las personas con discapacidad en el ámbito de la Economía Social, al impulso de la eliminación de trabas para la aplicación de ayudas a este sector y a la realización de acciones de información, mentalización y sensibilización social sobre las capacidades laborales de los discapacitados.

UN PASO MAS

JoséMaría Arroyo, presidente de la Fundación ONCE, destacó la importancia de este nuevo convenio de colaboración, "que supone un paso más en nuestra lucha diaria por la integración en el mercado laboral de las personas con discapacidad".

En esta línea, instó a todos los empresarios a que tomen conciencia de que una persona que sufra algún tipo de minusvalía "puede ser tan capaz de desarrollar un trabajo como cualquier persona sin discapacidad, siempre y cuando se le haya formado y preparado, que es lo quenosotros venimos haciendo desde hace tiempo", explicó.

Arroyo apeló a la sensibilidad de toda la sociedad y destacó la satisfacción que puede suponer para un empresario comprobar que una persona con discapacidad puede desempeñar un trabajo a pleno rendimiento, "amén del gran servicio social que esto supone", si previamente ha sido formada.

Por su parte, Marcos de Castro subrayó la importancia de integrar laboralmente a las personas con discapacidad "pero no por una acción de caridad, ni por demosrar buena voluntad, sino simplemente porque estas personas pueden ser tan competitivas y profesionales en el mercado empresarial como cualquiera".

Asimismo, hizo un llamamiento a otras empresas para que abran sus puertas a personas con discapacidad, "porque todas las compañías deben estar comprometidas con el entorno social que le rodea y si se aislan de éste, terminarán por aislarse empresarialmente", precisó.

PROYECTO CEPADITE

El Proyecto Cepadite, organizador de la jornada en la que se ha prcedido a la firma de este convenio, pretende desarrollar una experiencia piloto en el apoyo a la creación de empleo de personas con minusvalías, incorporando tecnologías de la información y la comunicación, bajo condiciones reales de competitividad, producción de áreas y cumplimientos de objetivos.

En este proyecto, que partió de la Iniciativa Comunitaria Horizon/Empleo de la Comisión Europea y en el que participan, entre otras entidades, Fundosa y CEPES, supone una experiencia de teletrabajo para peronas con discapacidad y la creación de un telecentro de empleo para ofrecer servicios a empresas innovadoras, aprovechando la sinergia de personas que trabajan por el empleo y la discapacidad.

El teletrabajo se plantea como una solución apropiada, al permitir el desarrollo de una determinada labor de forma flexible, tanto en tiempo como en ámbito. Se diseñarán experiencias de creación de empleo que incorporan las nuevas tecnologías como herramientas de trabajo a distancia, lo que facilitará el acceso l trabajo sin tener que desplazarse de sus casas.

Los trabajadores integrados en este proyecto, seleccionados de las bolsas de trabajo de Fundosa y Fremap, obtendrán un ayuda económica durante 13 meses, formación en habilidades para el teletrabajo y apoyo técnico y asesoramiento empresarial permanente.