La Fundación ONCE aportará un total de 74,4 millones de pesetas, que unidos a otros 10 millones que aportará la Consejería de Sanidad y Seguridad Social del Ejecutivo balear, permitirán empreder cinco proyectos de integración laboral y social de personas con discapacidad.

La residencia de Son Tugores recibirá casi 41 millones de pesetas para ampliar sus instalaciones para doce minusválidos psíquicos profundos más. Actualmente este centro cuenta con 60 plazas residenciales.

Los otros cuatro proyectos destinados a crear empleo son tres talleres ocupacionales (dos en Palma y uno en Manacor) y un centro especial de empleo en Menorca.

A la firma del convenio asistieron el consejero d Sanidad y Seguridad Social, Bartolomé Cabrer Barbosa; el vicepresidente primero ejecutivo de la Fundación ONCE, Rafael de Lorenzo, y el presidente de Cocemfe, Manuel Job Plaza, entre otros.

Cabrer Barbosa mostró el compromiso del Gobierno balear para seguir luchando por la integración laboral y social de las personas con minusvalías e insistió en "hacer comprender a la sociedad y, en especial, a los empresarios, el reto de la integración total del colectivo".

Por su parte, Rafael de Lorenzo pidi un equilibrio razonable de cooperación entre las instituciones y la Fundación ONCE para que las personas discapacitadas no estén solas en la lucha por esa integración" al tiempo que instó a las asociaciones de minusválidos de Baleares a "arrimar y trabajar tanto como a reivindicar".

De la aportación económica total, la residencia Son Tugores contará con casi 41 millones de pesetas; el taller ocupacional de Amaddip, de Palma de Mallorca, tendrá otros 20 millones de pesetas; el taller Aproscom de Manacr, 9 millones; el centro especial de empleo de Menorca, 7,7 millones; y el taller ocupacional El Aguila, de Palma de Mallorca, 6,9 millones de pesetas.