El acuerdo se iscribe en el marco del Programa Inserta de la Fundación ONCE, destinado a promover la integración laboral de personas con minusvalía.

Fruto del convenio, Alcampo se compromete a cubrir con discapacitados 150 puestos de trabajo en tres años, tanto en su plantilla como en las empresas filiales. La Fundación ONCE les dará formación y elaborará los estudios necesarios para la accesibilidad en sus centros laborales.

Patrick Coignard, director general de Alcampo, aseguró que los discapacitados tienen ua baza laboral muy importante, la voluntad, a la que su firma concede gran importancia.

Coignard se declaró "impresionado" por la labor que realiza la ONCE para la integración de personas desfavorecidas y anunció su disposición a abrir nuevas vías de colaboración con esta organización.

Por la Fundación ONCE, su vicepresidente ejecutivo, Rafael de Lorenzo, agradeció a Alcampo que colabore en el acceso al mercado laboral de personas que, aunque tengan más dificultades de formación, luego dedican a a empresa una gran entrega.