En un comunicado, la Fundación Francisco Franco considera que dicha norma es una "ley tramposa, traspasada por el rencor" y además es un "chantaje revisionista, que institucionaliza las dos españas".

Esta fundación lamentó que desaparezcan las placas que conmemoran los logros del Franquismo (pantanos, viviendas, regadíos), pero que existan otras "de la nomenclatura marxista" y estatuas de sus dirigentes, como la de Prieto y Largo Caballero, en Madrid.

A su juicio, "llegará un tiempo cribado de rencores y la historia grande acogerá, reivindicándolo, el tiempo en que los españoles siguieron a Franco en la larga marcha por la paz y la reconciliación, en un esfuerzo colectivo que colocó a España en la modernidad".