Según explicó a Servimedia el director general de la FAD, Ignacio Calderón, los bienes decomisados al narcotráfico se destinan actualmente a programas de asistencia a drogodependientes y a la prevención de toxicomanías, entre otras cuestiones, a través de un fondo que gestiona el Plan Nacional sobre Drogas.

No obstante, "pueden pasar hasta cuatro o cinco años" hasta que esos bienes pasan a dicho fondo y pueden ser utilizados, debido a una serie de procesos jurídicos que se inician tras cada incautación. En 2007, la Policía confiscó 83 millones de euros en bienes procedentes del narcotráfico.

Por ello, y ante la "dificultad" de poner en marcha sistemas judiciales rápidos, el director general de la FAD propone "fórmulas de prefinanciación" que permitan a las organizaciones disponer antes de estos recursos.

"Hay una serie de bienes que están ahí. Aunque se requieran una serie de procesos jurídicos para estar disponibles, el Gobierno podía hacer líquidos esos bienes y ponerlos a disposición de las organizaciones para que sean utilizados con rapidez", explicó Calderón.

Según un acuerdo que aprobó el Gobierno a finales del pasado año, los bienes decomisados al narcotráfico se destinarán a programas de asistencia a drogodependientes, a la prevención de toxicomanías y a dotar de más medios a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que se dedican a combatir el tráfico ilegal de estupefacientes.

Según datos del Plan Nacional sobre Drogas, el 70% del patrimonio del fondo se destina a mejorar la atención a la drogodependencia.