USO considera que la mayor parte de los empleados públicos rechaza el acerdo, puesto que este año podrían llegar a perder hasta 20.000 millones de pesetas en su poder adquisitivo.

Recuerda, además, que el fondo adicional previsto para el 2000 no tiene carácter compensatorio del repunte de la inflación, sino que se dedicará a actuaciones puntuales que la Administración pretende realizar, entre ellas los procesos de movilidad forzosa.

En opinión del sindicato encabezado por Manuel Zaguirre, la cuantía del fondo es superior a la del año en curso en 6.137 millones de pestas, no en 13.000 millones como se está diciendo.

La central acusa al Gobierno de practicar una política "insolidaria e irónica", puesto que al tiempo que se proclama un crecimiento económico sostenido, no se permite que dos millones de familias de empleados públicos se beneficien del mismo.