Asímismo, determinaron realizar paros interemitentes fuera de la prisión dentro de la última semana de septiembre.

Las reivindicaciones de los funcionarios se circunscriben al traslado de los 10 presos altamente peligrosos que están internados en el módulo 7, mientras se efectua l acondicinamiento necesario para acoger a este tipo de delincuentes.

Sin embargo, según denunció José María Clemente, portavoz del sindicato CSIF, ni siquiera se han comenzado las obras prometidas, que consistían en mecanizar este módulo para evitar el contacto físico entre recursos y funcionarios.

Las mismas fuentes precisaron que tampoco han atendido las peticiones del aumento de personal, ya que cinco funcionarios, dos de ellos mujeres, fueron trasladados y por contra sólo han ingresado en elcentro 8 funcionarios en prácticas, 3 procedentes de la prisión de Cáceres y 5 de la de Alcalá.

Además, se desconoce si la actual plantilla de funcionarios en prácticas, un total de 53 profesionales que constituyen el 30 por ciento del personal de servicio interior, van a ser reemplazados por el mismo número de personas cuando soliciten su marcha en el traslado de concurso.

Otro de los puntos discordantes se refiere al aspecto económico, ya que los funcionarios desean obtener mayores incentivos ate la sustancial modificación de las condiciones laborales del centro.

Los trabajadores se muestran preocupados también ante la masiva entrada de delincuentes que se prevé para finales de este año si finalmente el ministerio de Interior realiza la denominada "operación limpieza" para apartar de la calle a los pequeños delincuentes que aporvechan las grandes aglomeraciones par cometer sus delitos, sobre todo ante los acontecimientos del 92.

Saegún el portavoz del CSIF, este hecho puede producir enlas cárceles españolas un caos total porque el número de población reclusa se verá aumentada "irremediablemente".