Esta es la conclusión más destacada de la reunión mantenida hoy por el ministro de Administraciones Públicas, Jesús Posada, y los responsables de los sindicatos más representativos de la función pública.

El nuevo Estatuto deberá debatirse en las Cortes y, para ello, se cuenta ya con un borrador consensuado por los sindicatos, que cuentatambién con el respaldo de las comunidades autónomas y ayuntamientos pero que, al final de la legislatura pasada, contó con la oposición del PSOE.

Domingo Fernández, presidente nacional del CSI-CSIF, aseguró al término del encuentro de hoy que la pretensión de los funcionarios es lograr que mejoren sus condiciones de trabajo y que esto se refleje en el buen servicio otorgado a los ciudadanos.

Por su parte, el responsable de Función Pública de UGT, Julio Lacuerda, aseguró que es necesario aprobar l Estatuto y que éste refleje todos los asuntos relacionados con el sector, incluido el asunto de las retribuciones.

Lacuerda confió en que no sea muy difícil lograr un acuerdo parlamentario para aprobar el Estatuto y pidió al PSOE que "se acerque" más a los sindicatos y respalde el texto que éstos promueven.