Esta dolencia va acompañada de dolores de cabeza más intensos y recurrentes en el caso de los fumaores, además de una mayor congestión nasal, de acuerdo con un estudio de la Universidad de Yale (EEUU).

"Los resultados de esta investigación indican que el consumo directo de tabaco puede estar ligado a una incidencia mayor de la sinusitis", afirman los autores, quienes puntualizan que no se ha observado la misma relación en el caso del tabaquismo pasivo.

Los expertos de Yale especulan con que la nicotina, al igual que otros químicos nocivos presentes en el humo, fomenta la aparición de episodio sinusíticos al afectar de alguna manera la zona nasal y sus secreciones, como explican en la revista.