Fuejo, que hizo estas declaraciones tras la inauguración de un seminario sobre "Turismo rural: España y la experiencia europea", celebrado hoy en Madrid, manifestó que el objetivo de su departamento es recuperar la caída e turistas registrada en 1990.

"En cualquier caso", dijo, "el número de turistas no es lo más importante. Lo que realmente importa son los ingresos medios unitarios, es decir, lo que gasta cada turista en España al año, que es lo que ha descendido".

El responsable de Turismo también se mostró optimista en lo relativo a las reservas realizadas desde el extranjero para las vacaciones de Semana Santa y verano. A su juicio, una vez finalizada la guerra del Golfo Pérsico, "el clima y las perspectivas el sector han cambiado totalmente".

No obstante, señaló que "hay que controlar esta especie de euforia, para que no nos lleve a construir en la costa como se ha venido haciendo en los último años, creando una sobreoferta de alojamientos que ha deteriorado el turismo español".

En cuanto a la posibilidad de que el turismo del norte de Africa y Oriente Medio se desplace hacia España, dijo que está confirmada la debilidad de reservas para esos países y es posible que los turistas que tenían previsto isitar esas zonas se queden en su país o elijan otros destinos, como Italia y España.

COMITE DE CRISIS

También se refirió al comité de seguimiento creado entre la Administración y la CEOE para estudiar las repercusiones de la guerra del Golfo en el turismo español, que, según Fuejo, tiene previsto reunirse dentro de unos días.

Manifestó que no está previsto disolverlo por ahora aunque haya finalizado la guerra. "Soy partidario de mantener los contactos para experimentar una parte del futuro Conejo Asesor de Turismo, que se creará en breve", explicó.

Sobre la puesta en marcha del Plan Integral de Turismo, que el anterior ministro de Transportes, Turismo y Comunicaciones, José Barrionuevo, aseguró que estraría en vigor antes del verano, Fuejo señaló que "habrá que esperar a que el nuevo ministro lo retome".

En su opinión, el traslado de Turismo al Ministerio de Industria retrasará los proyectos que estaban previstos, ya que estos cambios "siempre afectan algo".

Finalmente habló del urismo rural y resaltó la necesidad de incrementar y coordinar la cooperación entre la Administración central y las comunidades autónomas para crear intrumentos de fomento más adecuados.

Anunció que están estudiando la negociación de un préstamo con el Instituto de Crédito Oficial (ICO) para actuaciones turísticas en el ámbito rural. Recientemente, Turismo firmó un crédito de 2.000 millones de pesetas con el ICO para mejora de los balnearios.

A juicio de Fuejo, "es necesario diversificar la ofert turística española y para ello habrá que convencer a los empresarios para que inviertan en turismos alternativos y no solamente en el de sol y playa, que en los últimos años ha atraído todas las inversiones, creando una sobreoferta de alojamientos en la costa".