El informe revela que el 88,9% de las familias españolas optan por tomar de postre fruta fresca, el 7,2% eligen productos lácteos como yogures y la mitad de ellas (49,2%) cierran sus comidas con tartas o bollería.

Este último dato, que según los expertos que presentaron esta mañana en Madrid los resultados del informe es muy elevado, demuestra que existe un cambio de tendencia en la nutrición, que influye de forma negativa en la alimentación de los niños.

Según el presidente de la Sociedad Española de Nutrición Básica y Aplicada, Manuel Serrano Ríos, en la elección del postre influyen las razone culturales y a pesar de que en España la mayoría de las familias toma fruta después de comer, existe una tendencia a sustituirla por productos dulces, ricos en grasas y que se compran elaborados.

Por comunidades autónomas, Extremadura, Murcia y Andalucía son los lugares donde se consume más fruta. Baleares y Cantabria son las regiones que menos eligen la fruta fresca cuando se trata de tomar postre.

NIÑOS OBESOS

Según el presidente de la Sociedad de Pediatría de Madrid y Castilla-La Mancha, Calos Marina, el 5% de los niños españoles son obesos y el 4% de ellos lo es a causa de un exceso de alimentación.

"Aunque no se trata de una cifra muy elevada", explicó Marina, "es importante porque la obesidad provoca efectos muy negativos en la conducta del niño", añadió.

En su opinión la obesidad hay que combatirla con una dieta adecuada, ejercicio físico y apoyo psicológico familiar, "es decir, que si el niño come lechuguita, que no esté toda la familia comiendo una tarta de fresa", comentó. El postre ideal para el consumo infantil es aquel cuyos nutrientes complementan a los de la dieta principal y el que tiene menos carga de materia grasa y azúcares.