Según informaron hoy a Servimedia fuentes de la Federación de Exportadores de Frutas y Verduas (FEPEX), las fresas españolas se están enviando de nuevo a Francia con la esperanza de que el Gobierno galo cumpla su compromiso y no vuelvan a reproducirse los ataques.

No obstante, queda pendiente aún el punto más delicado, que es el que está dañando económicamente a los productores españoles: que los supermercados e hipermercados franceses no cedan a las presiones de los agricultores y vuelvan a vender fresas españolas.

Fuentes de FEPEX aseguraron que el coste económico para los agricultore españoles de la campaña contra las frutas españolas en el año pasado fue de 3.500 millones de pesetas, debido fundamentalmente al boicot de los distribuidores galos.

Dichas fuentes consideraron "satisfactorias" las medidas legales anunciadas por Francia para evitar los ataques, pero no ocultaron su "sorpresa" y desconfianza ante el repentino cambio de la Administración gala.

Hasta ahora, FEPEX ha calculado los daños económicos de los ataques a los camiones la pasada semana en unos 60 millones depesetas, a lo que hay que sumar lo que se haya dejado de vender en el mercado francés.

Además, dicha federación señaló que habrá que observar la evolución del mercado galo en los próximos días, cuando comienza la exportación del melocotón y albaricoque español.